De acuerdo a normas establecidas por la agencia de estandarizacion de alimentos del Reino Unido (Food Standard Agency-UK) todo alimento debe estar perfectamente descongelado antes de someterlo a cocción, en primer lugar porque el tiempo de cocción se prolonga, aumentando esto el consumo el consumo de energía, y en segundo lugar, y además muy importante, es que las partes congeladas, generalmente en el centro del alimento (lo que ocurre muy comúnmente cuando se descongela con horno de microondas), pueden contener organismos contaminantes peligrosos para la salud humana que luego no serán eliminados durante la cocción, de no llegar a una temperatura mínima de 70°C en su interior. Muchas veces parece que todo el alimento esta descongelado en superficie, pero permanece congelado en el centro, por lo que es muy importante verificarlo antes de comenzar la cocción.
Hay diversas formas de descongelar, una de ellas es bajar el alimento del freezer al refrigerador con anticipación, pero el problema principal es el tiempo que lleva este proceso, que según el peso y volumen puede ser desde entre 12 a 24 horas, no permitiendo planificar comidas en un corto plazo. Otro método es dejarlo a temperatura ambiente, es decir fuera de la heladera, esto implica un proceso de entre 6 y 8 horas con el riesgo de contaminación por la exposición prolongada. Debemos tener en cuenta que ningún alimento, y especialmente las carnes, no deben permanecer fuera de la heladera por períodos mayores a 2 horas, básicamente por riesgos de contaminación. Otro método comúnmente utilizado es el horno de microondas, lo que además de consumir mucha energía, eleva la temperatura de la superficie del alimento iniciando un proceso de cocción, y normalmente mantiene congelado el centro del mismo.