Generalmente preparar mayor cantidad de masa de la que necesitás para una sola comida no lleva más tiempo que hacerla para varias, para luego congelarla y resolver en muy poco tiempo una nueva comida, solo es cuestión de hacer una mayor cantidad, dividirla en porciones y congelarla como te indicaremos más abajo. Esto inclusive lo podés hacer en masas con levadura, en este caso donde es preferible preparar la masa con levadura común, en lugar de la deshidratada, y aumentar la cantidad en un 50%.
Esto se puede trabajar de dos formas, la primera es la masa sin fermentar, en ese caso ocupa mucho menos volumen, pero tarda más tiempo en descongelarse, la envolvemos en un papel film o bolsa de polietileno aceitado y la metemos en el freezer sobre una superficie plana. Cuando la necesitemos la ubicamos sobre la bandeja defrost y en un corto plazo cuando tome la temperatura ambiente comenzará a levar como si recién la hubiésemos preparado, en este caso es aconsejable que el tamaño de los bollos no supere los 200-250 gr. cada uno.
La ventaja de descongelar en forma natural sin uso de energía es que no eliminás a las levaduras como ocurre con el horno a microondas o el agua caliente, es decir que luego de descongelada puede seguir levando como el día en que la congelaste.
El segundo caso es con la masa ya levada, se debe desgasificar, también congelarla sobre una superficie plana, luego para descongelarla procedemos de la misma forma, la colocamos sobre la bandeja defrost dentro de una bolsa de polietileno y dejamos que continúe su fermentación y seguimos como en el procedimiento anterior.
Cuando se prevee que no va a haber tiempo para preparar y cocinar panes caseros podemos realizar cocciones parciales, es decir preparamos la masa, la cortamos y distribuimos en porciones individuales del tamaño que deseamos al final, dejamos levar y los ponemos en el horno medio a bajo, unos 150°C, durante unos 20 minutos, hasta que las porciones queden de color pálido, es decir no completamos la cocción, dejamos enfriar y congelamos, cuando los necesitemos los colocamos unos 20 minutos sobre la bandeja defrost y luego los cocinamos a horno medio, 180°C, durante 20 minutos y tendremos pan horneado, como recién comprado.