Porque es muy importante descongelar muy bien una hamburguesa o cualquier preparación con carne picada/molida antes de cocinarla?
Para que luego se pueda realizar una cocción que permita llegar al menos a 70 grados centígrados y de esta forma eliminar cualquier organismo potencialmente perjudicial para la salud, principalmente las bacterias. Debemos tener en cuenta que las bacterias soportan la congelación en freezer y pueden sobrevivir luego de descongeladas, de ahí la importancia de una cocción adecuada a temperaturas que explicaremos más abajo.
Las bacterias generalmente se depositan sobre la superficie de las carnes en el momento del procesamiento ya sea en el frigorífico o en las plantas de fabricación de hamburguesas u otro tipo de preparaciones. Como se explicó arriba se encuentran siempre “sobre” la superficie de la carne y al procesarla, es decir picarla o molerla, se incorporan al interior de los productos.
A la hora de cocinar una hamburguesa hay que asegurarse de manejar la carne de manera segura, descongelar completamente la misma, mantenerla fría hasta el momento de cocinarla y mantener limpia la superficie de trabajo y por supuesto lavarse siempre las manos antes y después de manipular la carne picada/molida.
Lo ideal es cocinar una hamburguesa entre 10 a 15 minutos y luego comprobar el punto de cocción de la misma, lo ideal es hacerlo con un termómetro que nos permita llegar al centro de la hamburguesa y medir la temperatura interior, que debe estar, para el caso de la carne vacuna en torno a los 71°C, y en el caso de carne de pollo en torno a los 74°C, esto ocurre como dijimos más arriba entre los 10 y los 15 minutos de acuerdo con el grosor de la hamburguesa, estas son normas establecidas por el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos. Cualquier temperatura por debajo de las mencionadas no es considerada segura para carnes picadas.
Es muy importante seguir estas normas principalmente para los niños o los ancianos, dado que ellos son los que tienen más probabilidades de resultar gravemente afectados por una enfermedad transmitida por los alimentos.
Siempre después de usar un termómetro para alimentos, debe ser siempre limpiado con jabón o detergente y agua caliente.